Muchos de los síntomas causados por la tecnología pueden ser muy intensos en visión próxima. Por eso se habla de complejos, como sucede con el TUC (Technology Use Complex) o complejo por el uso de la tecnología, el cual se refiere al uso actual de la tecnología y el acceso desde temprana edad.
Los síntomas asociados con el uso de dicha tecnología son generalmente para visión cercana: fatiga ocular, cefalea, visión borrosa, diplopía, somnolencia, dificultad de concentración, pérdida de concentración y sensación de movimiento del texto en la pantalla.
La mayoría de los pacientes llegan a los establecimientos de salud visual como consecuencia del uso de la tecnología. El contacto que tienen los ojos con pantallas cada día es más alto. Durante su día a día no solo se enfrentan a largas jornadas, sino al mismo tiempo ven dos o tres pantallas, de tamaño diferente, a distancias distintas, con imágenes de colores acompañadas de efectos y en algunas ocasiones de sensaciones.
Los ojos del presente y del futuro cada día necesitan más profesionales de visión capacitados, que estén al tanto del mundo moderno. Para poder ver cómodamente y trabajar con eficiencia, se recomienda llevar la corrección visual prescrita por el especialista. Hay que tener en cuenta que los anteojos para trabajar con pantallas tecnológicas no incluyen a los lentes de visión sencilla para propósitos generales o a los multifocales de uso diario.
Los usuarios de la tecnología no son conscientes de la importancia de visitar a sus profesionales de la Salud Visual.
Fuente: GrupoFranja