Una investigación relaciona la obesidad con la pérdida de visión
La investigación realizada por NHS Fife y la Universidad de St Andrews (Fife, Escocia) ha resaltado el impacto negativo de la obesidad en la salud ocular. El estudio describió cada nuevo diagnóstico de hipertensión intracraneal idiopática (HII) en el departamento de oftalmología de NHS Fife entre agosto de 2013 y julio de 2014.
Dentro de este período, 13 pacientes recibieron un nuevo diagnóstico de la afección, que generalmente afecta a mujeres jóvenes con sobrepeso.
El Dr. Colin Goudie, del servicio de oftalmología del Centro Ocular Princesa Alexandra, en Edimburgo, dijo que la incidencia de 3,56 casos por cada 100.000 personas en la población de Fife fue ‘significativamente mayor’ que las estimaciones anteriores. “Creemos que esto se debe a los altos niveles de obesidad en la región”, dijo. “Encontramos que la incidencia de IIH en Fife, con afectación ocular, fue entre dos y seis veces mayor que la informada anteriormente en otros estudios realizados en países con un desarrollo similar”, dijo el Dr. Goudie.
Los investigadores destacaron que alrededor del 10 al 15% de los pacientes con HII padecen una discapacidad visual irreversible.
En 2017, cerca de un tercio de la población adulta en Escocia se clasificó como clínicamente obesa.
En el estudio de Fife, todos los pacientes diagnosticados con IIH durante el período de estudio tenían sobrepeso, con un IMC promedio de 36. El dolor de cabeza fue el síntoma más frecuente de presentación, mientras que tres pacientes se encontraban asintomáticos, pero se identificaron discos inflamados durante una prueba de rutina de la vista. Un paciente experimentó síntomas visuales. “Esto se puede aumentar con medicamentos y, a veces, con cirugía para prevenir cualquier daño a la vista a largo plazo y mejorar los síntomas del dolor de cabeza”, dijo. Sin embargo, concluyó “existe un grupo de pacientes que aún pueden desarrollar una pérdida de la visión progresiva y permanente a pesar del tratamiento inmediato”, advirtió el Dr. Blaikie.
Fuente: Revista Salud Visual