Nuestros ojos son de vital importancia y en muchas ocasiones no tenemos esto tan presente como debiéramos, sobre todo si padecemos de alguna dolencia en ellos.
En el caso de los más pequeños de la casa es igual de importante conocer la forma ideal de proceder con la higiene correcta de sus ojos. A continuación, os damos una serie de consejos para el cuidado ocular de los bebés:
- Es recomendable limpiar los ojos de los bebés todos los días, ya que éstos producen más mucosidad y de esta forma se puede evitar una posible oclusión de los lagrimales.
- Para la limpieza ocular se debe utilizar el uso de suero fisiológico, echándolo en el ojo del bebé cuando éste se encuentre boca arriba.
- Además, para quitar las legañas de los más pequeños, se puede hacer uso de toallitas o gasas estériles. Estas últimas deben estar húmedas en agua hervida templada o suero. Si se utilizan gasas o toallitas se debe usar una diferente para cada ojo y de esta forma evitar posibles contagios de un ojo a otro en caso de infección.