Así afecta el azúcar a tus ojos
El exceso de azúcar en la alimentación no sólo trae como consecuencia unos kilos de más, sino que también repercute negativamente en otras partes del organismo, como los ojos.
Los niveles altos de glucosa en sangre afectan a la salud visual. Tanto el consumo de azúcares, como el de grasas y alcohol, aumenta el riesgo de hipertensión arterial que afecta negativamente a nuestros ojos. Este aumento de la presión arterial puede provocar visión borrosa y, si el problema no se controla, los efectos pueden ser más graves, e incluso causar una retinopatía hipertensiva.
Las arteriolas, es decir, los vasos sanguíneos que se ramifican de las arterias riegan de sangre a los ojos. A la retina llega una importante cantidad de sangre, por ello, cuando la presión arterial es muy elevada el ojo se resiente, y puede ocasionar hemorragias, dilatación de las arterias, y en el peor de los casos una inflamación en el nervio óptico, conocida como edema de papila, que indica que se ha producido un daño en dicho nervio. Todos estos problemas pueden aparecer de forma más frecuente si, además de consumir demasiada azúcar, no se realiza ejercicio físico.
Por otra parte, el exceso de azúcar puede hacer que el organismo responda peor frente a las infecciones, incluyendo aquellas que afectan a los ojos y a la capacidad visual.
Además, el consumo elevado de azúcar puede provocar obesidad y el envejecimiento temprano de los tejidos de distintas partes del organismo como los ojos.
Riesgo de ceguera
El azúcar se debe consumir siempre con moderación, especialmente las personas que padecen diabetes. Cuando la diabetes no se trata adecuadamente ocasiona graves problemas de salud que van desde la amputación de alguna extremidad hasta la ceguera. A su vez, un mal control de los niveles de glucosa en sangre puede causar cambio de graduación, visión doble, opacidad del cristalino, glaucoma y alteración en la percepción de los colores.
El alto consumo de azúcar también puede producir migrañas y cefaleas.