Normalmente, el color del iris es resultado de la distribución de la melanina y también de otros pigmentos como el lipocromo. Su combinación determina la mayoría de las tonalidades que estamos acostumbrados a ver.
El color predominante es el marrón, presente en el iris de más del 50% de la población mundial. Sin embargo, hay personas que tienen los ojos amarillos, violetas e, incluso, rojos. Estas tonalidades “raras” son cinco en total.
- Verde. Aunque conocido, éste es el quinto color más raro en el ojo humano. Sólo 2% de la humanidad tiene esa coloración en el iris. Aunque en países como Hungría el porcentaje asciende a 20 y en Islandia a un 80% de la población. También está presente en ciertas regiones de Asia, lo que explica el color de ojos de la muchacha afgana (etnia pashtun) que una tapa de la revista National Geographic hizo célebre.
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Ámbar. El cuarto color en rareza es este tono amarillento que resulta de la predominancia de lipocromo en el iris. Estos “ojos de lobo” pueden verse en países como Rumania, Francia, España, Suiza, Italia o Eslovenia. También es frecuente en personas de Brasil y Asia.
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Violeta. Los ojos de este color son resultado de una mezcla de tonos rojos con reflejos azules. Están presentes, sobre todo, en las personas que padecen de albinismo, pero hay excepciones. La más célebre: Liz Taylor. Además de su talento actoral, la recientemente fallecida estrella era famosa precisamente por su mirada violeta.
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Negro. Superan en rareza a los ojos violeta, pero no hay que confundirlos, como habitualmente sucede, con los marrón oscuro. En los “auténticos” ojos negros –1% de la población los tiene– es prácticamente imposible diferenciar el iris de la pupila. Son comunes en personas de ascendencia africana y asiática y, en menor medida, en indígenas americanos. Puede deberse a que el iris sea de un marrón tan oscuro que se vea negro o a que la persona padezca aniridia, una enfermedad que causa la casi total ausencia del iris.
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Rojo. El primer puesto en rareza lo tiene el ojo rojo que, al parecer, existiría en realidad y no sólo como efecto del destello del flash. Como con el violeta, los albinos son los que más tienden a este color de iris, presente en las personas que carecen completamente de melanina. Los rayos solares atraviesan el iris reflejando la hemoglobina de los vasos sanguíneos de la retina, lo que da como resultado un color rojo. Esto trae aparejado fotofobia, estrabismo y miopía, entre otras patologías.
Fuente: Analítica